Cada 20 de Enero la celebración de San Sebastián Mártir es un evento que une a la comunidad de Chiapa de Corzo en torno a la fe, la tradición y el orgullo cultural.
San Sebastián Mártir es una de las figuras religiosas más veneradas en Chiapa de Corzo, Chiapas, donde cada año se celebra en su honor una de las festividades más importantes de la región: la Feria Grande. Esta celebración, que tiene lugar en enero, combina elementos religiosos y culturales que reflejan la profunda devoción de los habitantes hacia este santo. La imagen de San Sebastián es símbolo de fortaleza y fe, valores que se han transmitido de generación en generación en esta comunidad chiapaneca.
San Sebastián fue un soldado romano que vivió en el siglo III y es conocido por su valentía y firmeza en la fe cristiana. Según la tradición, Sebastián fue martirizado por orden del emperador Diocleciano al ser descubierto como cristiano. Fue atado a un árbol y atravesado con flechas, aunque milagrosamente sobrevivió. Finalmente, fue ejecutado por su inquebrantable devoción a Cristo. Debido a su historia de resistencia y lealtad a la fe, San Sebastián es considerado un protector contra las enfermedades y un símbolo de fortaleza espiritual.
Cada 20 de enero, la comunidad de Chiapa de Corzo celebra una festividad en honor a San Sebastián Mártir con diversas actividades religiosas y culturales. La celebración incluye misas, procesiones y la tradicional danza de los Parachicos, una expresión folclórica que ha sido reconocida como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. Los Parachicos, con sus coloridos trajes y máscaras de madera, recorren las calles en honor al santo, acompañados de música y cánticos que reflejan la identidad cultural de la región.
El simbolismo de San Sebastián Mártir en la Feria Grande de Chiapa de Corzo es profundo. Representa la fe inquebrantable del pueblo chiapacorceño, su resistencia ante las adversidades y su arraigada tradición religiosa. La festividad no solo es una expresión de devoción, sino también una forma de preservar la identidad cultural de la comunidad, fortaleciendo los lazos entre sus habitantes y recordando la importancia de mantener vivas las costumbres ancestrales.