Sembrando la Conservación: El Jardín Etnobiológico de Oaxaca (JEBO) es una institución única en su tipo, dedicada a la investigación, conservación y difusión del conocimiento tradicional sobre plantas y su uso en la cultura oaxaqueña. Su fundación, aunque no tiene una fecha exacta de inicio formal, se remonta a la década de 1980 con el trabajo pionero de investigadores y activistas comprometidos con la preservación de la biodiversidad y el conocimiento ancestral. A través de los años, el JEBO ha ido consolidando su labor, convirtiéndose en un referente en la etnobiología a nivel nacional e internacional.
Un Repositorio de Sabiduría: El JEBO no es simplemente un jardín botánico; es un centro de documentación viva de la riqueza biológica y cultural de Oaxaca. Su colección de plantas, cuidadosamente catalogadas y preservadas, representa una parte significativa de la flora de la región, incluyendo especies de gran importancia económica, medicinal y ritual para las comunidades indígenas. Además de la colección viva, el JEBO alberga una valiosa biblioteca y archivo con información etnobotánica, incluyendo registros históricos, entrevistas con conocedores tradicionales y estudios científicos.

Conservación y Desarrollo Comunitario: El trabajo del JEBO se centra en la conservación in situ y ex situ de especies vegetales, pero va más allá de la simple preservación biológica. La institución trabaja estrechamente con las comunidades locales, reconociendo su papel fundamental en la conservación de la biodiversidad y el conocimiento tradicional. A través de programas de educación, capacitación y desarrollo comunitario, el JEBO busca fortalecer la capacidad de las comunidades para gestionar sosteniblemente sus recursos naturales y preservar su patrimonio cultural.

Un Futuro Sostenible: El Jardín Etnobiológico de Oaxaca es un ejemplo inspirador de cómo la investigación científica, la conservación de la biodiversidad y el respeto por el conocimiento tradicional pueden trabajar en conjunto para construir un futuro más sostenible. Su labor de investigación, conservación y educación contribuye no solo a la preservación de la riqueza natural de Oaxaca, sino también al fortalecimiento de las comunidades locales y la difusión del conocimiento ancestral para las futuras generaciones. El JEBO se presenta como un modelo a seguir para otras iniciativas de conservación y desarrollo comunitario en México y el mundo.
