El Día Mundial contra el Trabajo Infantil se celebra cada 2 de junio desde 2002, promovido por la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Su lanzamiento fue resultado de la ratificación de dos convenios clave: el Convenio 138 sobre la edad mínima de empleo y el Convenio 182 sobre las peores formas de trabajo infantil. La fecha busca concienciar al mundo sobre la magnitud del problema y unir esfuerzos para erradicar la explotación de niñas y niños.
El objetivo central de esta conmemoración es visibilizar la necesidad urgente de:
Denunciar la explotación infantil.
Promover la escuela y el ocio como derechos fundamentales.
Fortalecer normas globales que protejan a la infancia.
Se vincula directamente con la Meta 8 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS): “poner fin al trabajo infantil en todas sus formas para 2025”.
Estrategias y alternativas para su erradicación
La OIT y organismos afines han implementado diversas medidas:
1. Convenios y normas internacionales: Ratificación y seguimiento de los Convenios 138 y 182, que establecen edad mínima y prohibición de trabajos peligrosos.
2. Programas de la OIT/IPEC: Desde 1992, el Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil (IPEC) fortalece capacidades nacionales, combate las peores formas de trabajo infantil y apoya la reintegración escolar.
3. Campañas globales: Movimientos como la “Global March Against Child Labour” (1998) presionaron para adoptar Convenio 182
4. Soluciones educativas y sociales: Educación sin costo y transferencias condicionadas, como “Oportunidades” en México, han demostrado reducción del trabajo infantil. Protección social universal, clave según la OIT para prevenir la explotación.
5. Inspección laboral y fiscalización: Normativa, inspecciones laborales, y sanciones por emplear menores en condiciones peligrosas, además de iniciativas como el pacto “Pacto del Mayab”.
La situación en México 🇲🇽
Según el Departamento de Trabajo de EE.UU., en 2023:
Aproximadamente 924 176 niños de 5 a 14 años trabajan.
Y 1.4 millones de adolescentes de 15 a 17 años realizan trabajos catalogados como peligrosos
De esos trabajos infantiles:
40 % en agricultura (chile, café, tomate…).
28 % en industria (confección, minería).
32 % en servicios (venta ambulante, limpieza, doméstico)
Además:
Niñas representan el 80 % de víctimas de explotación sexual comercial.
Niños indígenas, migrantes, rurales y con discapacidad están en riesgo elevado
Otra fuente, EFE, señalaba que en 2022 trabajaban unos 3.7 millones de menores de 5 a 17 años y 2 millones en empleos peligrosos
¿Qué podemos hacer como sociedad?
1. Exigir cumplimiento real de las leyes: Animar a denunciar a través de inspectores laborales y líneas como 1098.
2. Apoyar la educación: Promover y colaborar en programas comunitarios que mantengan a los niños en la escuela.
3. Fomentar la transparencia en cadenas productivas: Preferir empresas con políticas claras que garanticen que no empleen trabajo infantil.
4. Solidaridad con familias vulnerables: Apoyar iniciativas de protección social, becas o microcréditos.
5. Conciencia y denuncia: Informarse, difundir mensajes en redes con hashtags como #SayNoToChildLabour, y sumarse a campañas locales.
El Día Mundial contra el Trabajo Infantil es una invitación a actuar colectivamente. Erradicarlo implica reforzar leyes, garantizar educación universal, proteger a las familias y construir una cultura social que rechace cualquier forma de explotación infantil. Como ciudadanos, empresarios, docentes o consumidores, tenemos el poder de transformar realidades y garantizar que la infancia se viva con derechos, juegos y oportunidades no con trabajo ni explotación.